Hoy en dÃa tienen una gran aceptación entre el público fórmulas breves de teatro humorÃstico como sketch, monólogos o escenas cómicas, en los que, con una mirada benévola y a veces ácida, se retratan las debilidades humanas. También Cervantes, en el siglo XVII, se vale del humor para mostrar lo que no podÃa decir en tono serio sobre una sociedad basada en la hipocresÃa y en las apariencias.